miércoles, 1 de febrero de 2012

CRECIMIENTO DEMOGRÁFICO Y SU REPERCUSIÓN EN EL AGUA

La urbanización, junto con su inseparable desarrollo industrial, tiene profundos impactos sobre el ciclo hidrológico, tanto cuantitativa, como culitativamente.
El agua en las cercanías de las ciudades, se están acabando o degradando a tal punto que aumentan substancialmente el costo marginal de su abastecimiento.
Estos aumentos surgen de la necesidad de explotar fuentes nuevas y mas remotas, así como de los mayores requisitos de tratamiento a raíz del deterioro dela calidad del agua.
El bombeo excesivo del agua subterránea resulta en muchos casos en el hundimiento de la tierra con su consecuente daño a las estructuras urbanas, la disminución del nivel freático y en muchos casos, problemas de salificación.
La eliminación incorrecta de los desechos urbanos e industriales contribuye al deterioro de la calidad del agua en las fuentes valiosas de agua potable de alta calidad.
La impermeabilización de la superficie de la tierra en las áreas urbanas cambia considerablemente la hidrografía del aflujo resultando en picos mas altos e inundaciones mas frecuentes, y a menudo se reduce el recargo directo del agua subterránea. Al mismo tiempo, el aflujo urbano es una de las principales fuentes de contaminación no puntual. Los problemas de contaminación del agua en los lagos, aguas costeras y marinas, puede resultar en la perdida de oportunidades recreativas y rentas del turismo, agotamiento de las pesquerías, y problemas de salud asociados con el contacto recreativo y la contaminación de los peces y mariscos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario